Washington, 28 sep (PL) Las manifestaciones se intensificaron hoy en Estados Unidos, tras conocerse que un afrodescendiente recién ultimado por la policía en El Cajón, California, estaba desarmado.
A pocos días de que dos afroamericanos murieran a manos de la policía en Carolina del Norte y Oklahoma, este nuevo incidente reaviva el tema del racismo entre uniformados, ausente por cierto en el debate presidencial entre Hillary Clinton y Donald Trump.
El departamento de la Policía de El Cajon confirmó que dos oficiales respondieron a una llamada por un hombre caminando errático por una calle, quien se negó a mostrar sus manos y al sacarlas les apuntó con lo que parecía un arma.
De inmediato los oficiales dispararon al individuo, quien murió luego en el hospital, pero en la escena no fue encontrada ningún arma, lo cual provocó la indignación generalizada, seguida por llamados a la calma de las autoridades.
Un video filtrado a la prensa muestra a la presunta hermana de la víctima gritándole a los policías que los había llamado por ayuda y habían matado a su hermano